Una vez en el lugar, los efectivos desplazados se entrevistaron con el responsable de seguridad del local y a continuación con la sospechosa, que permanecía allí. Supuestamente había sustraído varias prendas y complementos, entre los que se encontraban un chaleco, una camisa, una corbata y una blasier.
La mujer reconoció la autoría de los hechos ante los policías, que trasladaron lo ocurrido a la autoridad judicial.