Una vez en el lugar, los actuantes observaron cómo un individuo joven escribía sobre un muro con un espray y procedieron a su identificación. Se trataba de un hombre de 23 años, nacido en Badalona y domiciliado en Barcelona.
Al ser preguntado el motivo por el que estaba pintando el muro, contó que estaba saliendo con una chica de la zona y quería poner “un poco de romanticismo al lugar con frases bonitas en la pared”, según informa la Policía Local.
Así, los agentes le dieron hasta las 06:00 horas para dejar la pared como estaba y en el caso de que no fuese capaz de hacerlo, le pondrían una multa.
Sobre las 04:40 horas, los mismos policías volvieron a pasar por el lugar y comprobaron que “la pared estaba completamente pintada de blanco, todavía mejor de lo que estaba”, motivo por el que no procedieron a cursar la denuncia.