Por ello, los agentes comprobaron a través del sistema informático los datos de dicho ciclomotor y vieron que carecía de seguro obligatorio desde el año 2015, presentaba la ITV caducada desde 2016 y a su titular le constaba una suspensión temporal del permiso de conducir por pérdida de vigencia.
Ante esta situación, procedieron darle el alto activando los dispositivos luminosos del vehículo policial, sin que el conductor se detuviese. Seguidamente, se pusieron a su altura indicándole que orillase a la derecha de la calzada, haciendo igualmente caso omiso a las reiteradas indicaciones.
Al llegar a la confluencia de Ramón Nieto con la calle Manuel Álvarez, y dado que el semáforo se encontraba en rojo, los policías aprovecharon para cortarle el paso, momento en el que uno de ellos se apeó del vehículo e indicó al conductor que apagase el ciclomotor, pero éste dio marcha atrás tratando de huir, por lo que el agente apretó la maneta del freno y sujetó por el hombro a su conductor.
Seguidamente, condujeron a los dos ocupantes hasta la acera donde procedieron a su identificación. A continuación, solicitaron la presencia de una grúa para trasladar el ciclomotor al depósito municipal y tramitaron las multas por carecer de seguro y por la ITV caducada, así como la denuncia al juzgado por carecer de permiso de conducir.
Sin embargo, cuando el operario de la grúa estaba enganchando el ciclomotor, el hombre cogió el casco que se encontraba en el suelo e intentó golpear a los dos policías, por lo que los agentes tuvieron que reducirlo a pesar de ofrecer gran resistencia, motivo por el que finalmente procedieron a su detención.