Al llegar al lugar indicado, los efectivos desplazados encontraron a la persona que había aviso a la policía y a la supuesta víctima en la calle. Allí, la agredida contó a los agentes que convive con su pareja desde hace dos años, pero que últimamente tenían problemas en la relación.
Además, relató que ese día, en torno a las 15:00 horas, cuando se encontraba sola paseando por el parque de O Castro, notó un fuerte tirón del pelo por su espalda, acabó cayendo al suelo y cuando se dio la vuelta para ver al agresor le pareció reconocer a su pareja, que estaba huyendo a la carrera.
A continuación, se dirigió a un centro médico, donde fue asistida de las lesiones sufridas. Además, al volver a casa comprobó que JL.A.R no estaba. Ya de noche, cuando su pareja llegó al domicilio, le recriminó lo sucedido y le mostró un informe médico del ataque, por lo que comenzaron a discutir.
En un momento dado, él le arrebató el informe y se encerró en la habitación para esconderlo. Luego, la discusión subió de tono hasta el punto de que ella se asomó por la ventana para pedir auxilio para que alguien llamase a la policía.
En ese instante, siguiendo su relato, su compañero sentimental la agarró del cuello con fuerza a la vez que la zarandeaba, tirándola al suelo e intentando cogerle también su teléfono móvil. A pesar de que se produjo un forcejeo, ella pudo zafarse y salir a la calle para solicitar ayuda.
La persona que había llamado al 092 confirmó que había visto cómo la mujer pedía auxilio desde la ventana y cómo un hombre la agarraba del cuello para meterla en el interior de la vivienda. También indicó que instantes después vio salir a la mujer a la calle, desde donde hicieron la llamada a las fuerzas de seguridad. Por todo ello, los agentes procedieron a la detención del supuesto agresor.