Una vez en el domicilio, situado en la Gran Vía, los agentes se entrevistaron con el solicitante, quien les contó que tras llamar de forma insistente al domicilio de su hermana, ésta no contestaba. Por ello, temía que pudiera haberle ocurrido algo grave, ya que a él le habían alertado desde el servicio de teleasistencia después de que saltara la alarma de inactividad corporal que lleva su hermana en la muñeca.
Los policías solicitaron una unidad medicalizada y en presencia del requirente, que no tenía llaves del piso, y ante el estado de necesidad, entraron en la vivienda a través de una ventana después de romper el cristal.
Una vez en el interior, vieron que había una mujer en posición decúbito supino, tendida encima de una cama, en estado inconsciente.
Los servicios sanitarios informaron de que la mujer, de 57 años, había padecido un shock hipoglucémico causado por un bajo nivel de glucosa en sangre debido a la diabetes que sufre. Tras ser tratada en el domicilio, lograron estabilizarla sin que fuera necesario trasladarla al hospital.