Ambos mantuvieron una reunión en la que, con el objetivo de responder «a una reivindicación histórica de la Universidad», la Consellería se comprometió a financiar esta actuación, a la que se destinarán alrededor de 1,5 millones de euros y que se realizará a lo largo de los próximos tres años.
Por ello, el horizonte temporal que se contempla pasa por comenzar con el proceso entre finales de este año y comienzos del próximo y acabar la obra a finales de 2018.
En declaraciones, Román Rodríguez destacó que se trata de una actuación «deseada, muy solicitada y de gran repercusión tanto para la propia universidad como para el Casco Vello de Vigo», puesto que ayudará a revitalizar una de las principales arterias de la ciudad. Esta acción es fruto, añadió el conselleiro, «de una suma de diferentes voluntades» en torno a una idea, que no es otra que «trabajar en lo que es útil para los ciudadanos», dijo.
Tal y como recordaron, la obra supondrá la rehabilitación de tres edificios que suman una superficie de más de 1.500 metros cuadrados. Una vez terminada la reforma, la nueva sede institucional de la Universidad de Vigo albergará a personal administrativo, del rectorado y de I+D+i. Además, también se instalará el Centro de Linguas, se habilitarán espacios de coworking y zonas para impartir conferencias, organizar actos o llevar a cabo actividades culturales.
Todo ello favorecerá el contacto directo de la ciudad con la vida académica promoviendo así el conocimiento de las actuaciones que se llevan a cabo en la institución y convirtiendo a la Universidad de Vigo «en un ente próximo y no aislado de la ciudad».