Pero todo llega a su fin. Como si estuviera hecho a propósito, con la llegada de diciembre, las nubes darán paso a los cielos despejados. Aunque todavía podría caer algún aguacero a primera hora del domingo, la situación se irá estabilizando progresivamente. La mejor noticia es que los días secos se prolongarán durante la siguiente semana. El pronóstico a medio y largo plazo no prevé precipitación alguna, lo que permitirá descansar un poco de tanta lluvia y olvidar el paraguas en casa.
Todo ello gracias a que las altas presiones volverán a Vigo y tenderán a estabilizar la atmósfera. No obstante, las buenas noticias no son plenas, ya que también llegaran vientos del norte, que el lunes soplarán con cierta intensidad.
“Esperamos jornadas de tiempo seco, con el cielo muy abierto en las horas centrales del día, aunque las mañanas serán frías”, apunta Meteogalicia. Y es que esos vientos del norte propiciarán un descenso de las temperaturas, especialmente durante las madrugadas. A medio plazo se esperan mínimas de 8 grados.
Aunque todavía queda mucho, la previsión es optimista para el puente de diciembre, para el que Vigo espera miles de visitantes atraídos por la iluminación de Navidad, que conseguirá llenar los hoteles la ciudad. Eso sin olvidar a los propios vigueses, que ya no se verán condicionados por el tiempo para poder disfrutar de su alumbrado o atracciones como la noria.