Así, en la entrada de una finca de su propiedad que muchos usuarios del hospital utilizan para dejar sus vehículos, ha colocado una gran pieza de granito para evitar que se utilice como aparcamiento alternativo y gratuito. En la explanada, además, la concesionaria tiene almacenado material de obra por lo que a lo largo de la jornada son frecuentes las idas y venida de una pequeña grúa para retirar y colocar la piedra y así poder trasladar dicho material.
Según señalaron fuentes cercanas, este miércoles está previsto que la pieza se reemplace por una valla que cumpla las mismas funciones, esto es, impedir a la gente aparcar en esa explanada sin que cause tantos contratiempos a los empleados de la concesionaria como la piedra, que deben mover cada vez que necesitan utilizar el acceso a la finca.
Las primeras imágenes de la gran piedra fueron subidas a las redes sociales por parte de usuarios que en la tarde del lunes incluso llamaron a la Policía Local al comprobar que no podían salir con sus vehículos. Fuentes policiales precisaron que acudieron hasta el lugar pero que antes de llegar ya les habían informado de que sus servicios no eran necesarios ya que una grúa -la de la concesionaria- había quitado la piedra.
Las quejas de los usuarios no se limitan a esta explanada ya que también a través de las redes sociales han subido una imagen de una valla recientemente colocada en la acera que baja del aparcamiento destinado a los trabajadores y que obliga a los propios peatones a bajar a la calzada para poder cruzarla. Según critican, la valla se ha colocado para evitar que coches y motos se suban a dicha acera.
Mientras tanto, tanto los trabajadores como los usuarios del centro sanitario utilizan las opciones a su alcance para evitar dejar sus coches en los aparcamientos que Aljamil gestiona por lo que tanto las cunetas como las aceras donde aún no se han colocado bolardos están repletas de vehículos. La situación es más llamativa aún en la zona alta del hospital, donde se ubican Urgencias y el aparcamiento más caro -un usuario pagó 27,10 euros por 8 horas y 18 minutos-. Allí los coches ocupan las rotondas, aceras e incluso el carril central del vial que circunvala el centro sanitario.
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