La jornada se abrió con la cancelación del primer vuelo de la mañana, operado por Air Europa y con llegada prevista a las 08.10 horas, que ni siquiera salió de Barajas. Sí lo hizo minutos después el siguiente, de Iberia, pero al acercarse a la ciudad tuvo que desviarse hacia Santiago. Lo mismo le pasó al poco al que partió de Barcelona, de la aerolínea Vueling, que debía aterrizar a las 09.20 horas pero lo hizo más tarde en Lavacolla.
Estos tres vuelos, como es habitual, trastocaron las salidas de sus tres correspondencias de regreso y los viajeros desviados tuvieron que ser trasladados a la capital gallega por carretera.
La situación no mejoró con el transcurso de las horas y posteriormente Iberia también tuvo que redirigir otro Madrid-Vigo hacia Santiago, obligando a conducir a los pasajeros del siguiente Vigo-Madrid a Lavacolla.
Por su parte, TAP Portugal prefirió directamente cancelar la conexión con Lisboa y no operar ninguno de los dos vuelos previstos. La normalidad se fue restableciendo conforme avanzó el día y, con él, se fueron despejando los cielos. Ya por la tarde los aviones pudieron tomar tierra sin dificultad.
Dieciséis vuelos afectados en total
Estos problemas se vienen repitiendo desde la semana pasada y el total de vuelos desviados o cancelados asciende ya a dieciséis, la mayoría este lunes. Con este panorama, los usuarios del aeropuerto están viendo que sus viajes se encuentran totalmente supeditados al tiempo que haga cada día, especialmente a primera hora de la mañana, cuando la niebla puede hacer acto de presencia incluso en jornadas que se prevén despejadas.
Según recoge el blog de información especializada aeropuertodevigo.info, el número de afectados supera las 1.800 personas. Está previsto que los trabajos de sustitución del ILS concluyan el 30 de junio.