El traslado de esta unidad de Hemodiálisis y de tres consultas de Nefrología del Meixoeiro supone que un centenar de pacientes recibirán ya tratamiento la próxima semana en el nuevo edificio hospitalario. Por ello, el lunes se incorporarán al Álvaro Cunqueiro 68 trabajadores de todas las categorías profesionales incluyendo facultativos, personal sanitario y no sanitario de estos dos servicios, 44 de Anatomía Patológica y 24 de Nefrología.
Las nuevas dependencias de Nefrología están emplazadas en el bloque ambulatorio, en la planta 1, y ocupan una superficie aproximada de mil metros cuadrados. Cuentan con seis consultas, una unidad de Hemodiálisis con 25 puestos, despachos médicos y varias salas polivalentes de trabajo y sesiones. Por ello, se podrá unificar el trabajo que hasta ahora vienen realizando el Xeral y el Meixoeiro.
«Hecho que sin duda mejorará el funcionamiento del servicio ya que hasta ahora contábamos con dos estructuras que generaban disfunciones, eran diferentes y asimétricas, y mientras que la del Meixoeiro estaba muy adaptada a las necesidades, la del Xeral presentaba importantes deficiencias y limitaciones espaciales», indicó el jefe del servicio de Nefrología, José María Lamas Barreiro, que añadió que «los pacientes que acudían al Xeral serán los más beneficiados con el cambio ya que experimentarán un importante salto cualitativo en las condiciones de las prestaciones asistenciales».
Este último servicio del Xeral se trasladará el 13 de julio, completando el personal con otros 28 profesionales hasta completar los 52 que conforman el servicio.
De todos modos, en el Meixoeiro permanecerá un dispositivo temporal mientras no se cierren las Urgencias (el 4 de septiembre) y permaneza activa la hospitalización habitual de pacientes con una demanda potencial de atención nefrológica con un nefrólogo y un equipo de enfermería para atender las urgencias y los pacientes agudos hospitalizados en el centro.
«Otra de las ventajas de la nueva infraestrucutra es que posibilitará en un futuro plantear un incremento de la cartera de servicios de Nefrología con nuevas prestaciones que hasta ahora no existen en el área de Vigo», dijo el doctor Lamas.
El servicio de Nefrología realizó el pasado año 6.000 consultas y entre las patologías más frecuentes destaca la enfermedad renal crónica, que es una de las que presentan un mayor impacto sanitario con el 2 por ciento del gasto sanitario total en Galicia. Existen 500 pacientes con esta patología, 250 de ellos portadores de un transplante renal funcionante y otros 250 que están obligados a dializarse con hemodiálisis o diálisis peritoneal.
La diálisis es el procedimiento por el que se depuran las sustancias residuales del metabolismo cuando los riñones enfermos no son capaces de eliminarlas y adquieren niveles tóxicos en el organismo. Existen dos tipos de diálisis: hemodiálisis y diálisis peritoneal. Para hacer hemodiálisis es necesario acudir a un centro hospitalario tres días a la semana a conectarse durante al menos cuatro horas al riñón artificial o máquina de hemodiálisis mientras que la segunda se puede realizar en el domicilio del paciente.