La tarea no es fácil, pero el gol logrado por Adrián en la primera parte del choque de ida hace albergar esperanzas a los celestes, que ya saben lo que es remontar una eliminatoria en esta Copa del Rey. Lo hicieron en cuartos de final, cuando eliminaron a la Real Sociedad en A Madroa en un partido de vuelta que se decidió con una prórroga en la que hubo tres goles y dos expulsados. Ante los donostiarras, el resultado de la ida fue 2-1, por lo que este domingo crece el nivel de dificultad.
Si el Celta consigue darle la vuelta a la eliminatoria, lograría clasificarse para la final de la Copa del Rey juvenil por segunda ocasión en su historia. La primera y única vez que llegó tan lejos en esta competición fue en 1964, cuando aún se denominaba Copa del Generalísimo. Su verdugo en la final fue el Athletic Club (2-1), gran dominador en los sesenta al conseguir cinco títulos de manera consecutiva.
Como ya ocurrió en la vuelta de la eliminatoria ante la Real Sociedad, el fuerte calor será un factor a tener en cuenta. Los celestes se apoyarán en su afición -la entrada será gratuita- e intentarán salir en tromba buscando ese gol que les meta de nuevo en la eliminatoria. En el otro cruce de semifinales, el Real Madrid tiene prácticamente asegurado el pase a la final tras golear al Valencia en la ida (4-1). El Celta intentará evitar que se viva una final madrileña.