Los trabajos para cambiar el deteriorado césped de Balaídos comenzaron hace dos semanas. La encargada de llevarlos a cabo ha sido la empresa Royal Verd, que también se ocupará de su mantenimiento. Una cuadrilla de trabajadores se ha desplazado desde Cataluña a Vigo y permanecerá en la ciudad mientras forma a operarios locales para que finalmente sean ellos los que se encarguen del cuidado del terreno de juego.
En las últimas horas se llevaron a cabo las tareas finales, como el pintado de las líneas, y este sábado los futbolistas lo pisaron por primera vez. Eduardo Berizzo percibió un cambio importante respecto al anterior césped, cuyo maltrecho estado dificultaba el juego a los celestes e incluso podía llegar a provocar lesiones.
El nuevo césped alcanzará su estado óptimo en unas semanas, pero estará en buenas condiciones para el partido de este domingo ante el Sevilla a pesar de las lluvias caídas en las últimas horas. «Es muy buen campo. Se rompe un poco por la ternura de su reciente aplicación, pero es un excelente campo, donde la pelota corre con velocidad. Irá mejorando a medida que arraigue, pero el primer contacto ha sido muy bueno», señaló Eduardo Berizzo este sábado en rueda de prensa.