Radoja estará de baja tres semanas, por lo que podría volver a los terrenos de juego en el último partido del año, que enfrentará al Celta con el Athletic Club en Balaídos el 30 de diciembre. El serbio se resintió de unas molestias en la zona inguinal en la semana previa al derbi ante el Deportivo. A pesar de viajar a A Coruña, no disputó este partido y también causó baja ante el Sporting de Gijón el pasado sábado.
El jugador, que ya fue operado la pasada temporada de una pubalgia que le impidió jugar en el último tercio de competición, decidió en esta ocasión trasladarse a Múnich para ser intervenido. Se perderá los partidos de Liga ante Betis, Espanyol y Granada y la vuelta de la Copa ante el Almería. Probablemente esté ya recuperado para el encuentro ante el Athletic.
El jugador recibirá previsiblemente el alta hospitalaria este jueves y comenzará de manera inmediata el proceso de rehabilitación.