El director deportivo celeste aseguró este lunes que no dudaba en ningún momento de la capacidad realizadora del uruguayo, pero reconoció que no esperaba este nivel de efectividad. “Estamos contentos. Uno piensa que va a meter goles pero tampoco que va a empezar tan pronto”, declaró.
A este respecto, quiso alabar el trabajo del vestuario a la hora de integrar a las nuevas incorporaciones. Uno de los secretos del Celta en los últimos años ha sido el grupo que han formado los propios jugadores. “Quiero ensalzar al grupo. No sólo son los jugadores que llegan, sino cómo los recibe el grupo. Para mí es muy importante cómo se sintió desde el primer día”, subrayó.
Hombres como Cabral o Roncaglia han “ayudado a hacer más fácil” la adaptación de un futbolista extranjero tan joven como Maxi Gómez.
Emre Mor
Otro de los nuevos, Emre Mor, el último en llegar, ha sido recibido por la afición como un ídolo. Se pudo comprobar este domingo en su debut. Nada más tocar el balón se generó un murmullo en la grada que vaticinaba que algo iba a pasar.
El internacional turco apenas tuvo tiempo para demostrar grandes cosas, pero sí se le vieron maneras y mucha rapidez con la pelota en los pies. Sobre él, el director deportivo celeste ha aclarado que su fichaje, procedente de un club con poderío económico como el Borussia Dortmund, no ha roto la escala salarial de la plantilla, algo que podría poner en aprietos al club o provocar celos en otros jugadores de peso.
Además, Miñambres volvió a explicar que el Celta seguía a Emre Mor desde hace mucho tiempo y que intentó cerrar su incorporación como cedido anteriormente.