Además, el Chelo pudo celebrar una victoria por 2-0 frente a Camerún con goles de Arturo Vidal y Vargas. El partido no sobresalió por su juego sino por su polémica, ante la aplicación del videoarbitraje en dos ocasiones. En ambas el árbitro tuvo que soportar la impaciencia de los jugadores a la hora de tomar una decisión.
En cualquier caso, Chile venció con un Marcelo Díaz seguro en el centro del campo. Completó todo el choque y manejó con criterio la distribución del juego, aunque mancilló su actuación con uno de sus habituales deslices. El céltico perdió un balón en una zona comprometida que provocó un peligroso ataque del conjunto africano. Por suerte para La Roja, sólo fue un susto.
Todavía más destacó Hjulsager, que cargó sobre sus espaldas con el juego ofensivo de Dinamarca, tanto creando juego como generando ocasiones de gol. El combinado nórdico cayó ante Italia (0-2) pero el futbolista de Amager tuvo en sus botas el tanto del empate cuando perdían 0-1. Y por dos veces, primero en el minuto 58 con un disparo cruzado desde un lateral y luego con un tiro lejano, desde el pico del área, que el portero italiano desbarató con un auténtico paradón.
Hjulsager dejó claro que tiene galones en su equipo, tanto por monopolizar el ataque danés como por erigirse como responsable de ejecutar los lanzamientos de falta desde la frontal y por encargarse del lanzamiento de los córners.