Los peñistas se marcharon moderadamente satisfechos de una reunión que se desarrolló en un clima cordial y constructivo. En ella estuvieron presentes el coordinador de seguridad, un agente del Cuerpo Nacional de Policía, y el director de seguridad del Celta, Julio Vargas.
En este encuentro con los peñistas, admitieron errores e incluso el representante de la Policía los asumió como propios a pesar de deberse en muchos casos a problemas generados por la empresa de seguridad privada que opera en Balaídos. También prometieron soluciones para que estos no se vuelvan a repetir.
Los aficionados celestes pudieron trasladarle sus quejas y preguntas a los responsables de seguridad, que trataron de explicar el porqué de cada una de esas incidencias. También aseguraron que en los próximos partidos se relajará el control de bufandas y banderas en los accesos al estadio que tanto ha molestado a la afición del Celta y que ha provocado situaciones tan extrañas como la retirada de una manta a un aficionado por contener calaveras.
Los peñistas, como ya hemos dicho, salieron satisfechos de la reunión y de momento quedan aplazadas posibles protestas con el fin de comprobar si las medidas prometidas se materializan.
Artículos relacionados:
Calavera de los Blues en Río Alto; en Marcador, prohibida… en una cazadora
Expulsado de Río Bajo por llevar una bufanda de los Celtarras de los años 80
Las peñas se reunieron con el club y no habrá protesta conjunta
Control exhaustivo de bufandas y bronca contra Tebas y La Liga