Como había prometido, Antonio Mohamed le dio la titularidad a Roncaglia, pero no lo colocó en el puesto de central, sino como lateral derecho. Hugo Mallo, por tanto, adelantó su posición. La intención del técnico era blindar la banda izquierda del ataque del Levante ante la peligrosidad de Morales. El sacrificado fue Brais Méndez. El resto, los mismos que empataron ante el Espanyol.
El Levante saltó al campo con la intención de avasallar al Celta y en el minuto 1 Morales ya dispuso de una primera ocasión. El Celta dejó hacer en este inicio y supo aprovechar su oportunidad cuando esta llegó. Fue tras una jugada a balón parado. Los vigueses botaron un córner desde el perfil derecho. Campaña despejó dentro del área y el balón le cayó a Pione Sisto en la izquierda. Con una espléndida maniobra, el danés se deshizo de Morales y avanzó hacía portería pegado a la línea de fondo. Sisto, prácticamente sin ángulo, sorprendió a todos, especialmente al meta Oier, con un potente disparo ante el que nada pudo hacer el portero levantinista. Un golazo.
Poco le había costado ponerse por delante al Celta, que parecía sentirse cómodo a pesar de que el Levante era el que tenía el balón. Tras un disparo de Morales que atajó Sergio, llegó la segunda oportunidad celeste. Y fue muy clara. Hugo Mallo puso un gran centro desde la derecha y Maxi Gómez, con todo a favor, no impactó en condiciones con el balón y lo acabó mandando fuera.
El partido estaba animado y, solo dos minutos después, fue Roger el que falló una clara ocasión al rematar fuera un centro desde la derecha. El delantero del Levante, totalmente solo en el área pequeña, quiso picar su testarazo y el bote sobre el césped acabó mandando el cuero por encima de la portería de Sergio.
El Celta mejoraba con el paso de los minutos, mientras que el Levante se frustraba ante la aguerrida defensa celeste. Y los de Mohamed aprovecharon el desconcierto local para aumentar su ventaja. Fue en una contra, en una jugada magníficamente trenzada por los vigueses. Pione Sisto volvió a ser protagonista al combinar con Lobotka en banda izquierda y acabar enviando un gran servicio a Maxi Gómez. El uruguayo encaró a Oier y aprovechó que el portero no estaba cubriendo el primer palo para colar el balón entre él y el poste.
Se estaba viendo una versión letal de un Celta bien pertrechado atrás y eléctrico en ataque. El Levante lo siguió intentado hasta el descanso, pero Sergio no sufrió en exceso.
En la segunda mitad, los locales salieron en tromba y, de hecho, cuando no se había cumplido el primer minuto, Roger Martí dispuso de una espléndida ocasión. El delantero, solo ante Sergio, acabó mandando el balón arriba.
El Levante, apoyado por su público, intentaba creerse que la remontada era posible. Sin embargo, atacaba con más corazón que cabeza y, este lunes, la versión defensiva del Celta era la buena.
Con el paso de los minutos, el ímpetu local fue decayendo y el Celta al fin pudo salir de su campo y acercarse por la portería contraria. En el 66, Iago Aspas, renqueante desde que recibió un pisotón en el tobillo en la primera mitad, abandonó el campo para dejarle su puesto a Boufal.
Y un minuto después, el Celta se topó en dos ocasiones con el palo. El primero fue un inspirado Pione Sisto, que envió prácticamente a la cruceta un disparo de falta directa. El rechace le acabó cayendo a Fran Beltrán, que centró al área, donde Néstor Araújo cabeceó la bola. Oier, con una gran parada, logró despejar el cuero y este se acabó estrellando en la madera.
Parecía que al Celta le esperaba un final de partido tranquilo, pero todavía quedaban sobresaltos. Y es que a falta de un cuarto de hora para el final, Raphael recibió ante Sergio, trató de regatear al portero celeste y este le acabó derribando. Hernández Hernández no lo dudó: penalti. Morales fue el encargado de transformar la pena máxima y apretar el marcador.
En el 81, se marchó Pione Sisto, el gran protagonista del partido. Pero antes, a punto estuvo de hacer el 1-3 con un disparo desde la frontal que se marchó fuera por muy poco. El danés, exhausto, dejó su sitio a Okay. El objetivo de Mohamed era reforzar el centro del campo y evitar sustos. Y no los hubo, ya que fue el Celta el que más se acercó al área contraria en estos últimos minutos. Boufal llevaba peligro en cada internada y ya en el descuento se inventó un pase para Eckert, recién salido al campo. El alemán no acertó en su disparo. Finalmente, no llegó el tercer gol, pero el Celta sumó una victoria por primera vez desde que Mohamed se sienta en el banquillo.
Levante: Oier; Coke, Rober Pier, Postigo, Toño; Campaña, Doukouré (Prcic, min. 46); Jason (Raphael, min. 58), Bardhi (Rochina, min. 70), Morales; y Roger.
Celta: Sergio; Roncaglia, Néstor Araujo, Cabral, Júnior Alonso; Hugo Mallo, Lobotka, Fran Beltrán, Pione Sisto (Okay Yokuslu, min. 81); Iago Aspas (Boufal, min. 66) y Maxi Gómez (Dennis Eckert, min. 89).
Goles: 0-1, min. 9: Pione Sisto; 0-2, min. 34: Maxi Gómez; 1-2, min. 78: Morales, de penalti.
Árbitro: Hernández Hernández (colegio canario). Mostró tarjeta amarilla a los locales Rober Pier y Campaña; y a los visitantes Hugo Mallo, Boufal y Sergio.
Incidencias: Encuentro correspondiente a la 2ª jornada de Primera División disputado en el estadio Ciutat de Valencia ante 21.122 espectadores.