«Estoy mejor. Me sacaron los puntos hoy. Lo que más me jode es el aparato este que me pusieron. Pero ya me estoy acostumbrando y hasta le estoy agarrando cariño. Parezco Robocop. Me van a poner una protección de fibra de vidrio especial para que me dejen jugar y un poco más pequeña porque con esta igual le saco un ojo a alguno«, bromeó Augusto este viernes en sala de prensa.
La lesión se produjo en el partido ante el Barcelona en una lance con Iniesta. Aun así, el argentino acabó ese encuentro y jugó tres días después en Eibar antes de pasar por el quirófano. Augusto no le da mucha importancia a que el dedo pueda dañarse este domingo. «Yo quería jugar en Eibar y si me tengo que perder un partido, que solo sea uno. Ya está bien con dos semanas. Si me lo rompo del todo, me lo rompo del todo. Me quedan 19 dedos más, así que mucho problema no tengo«, dijo y añadió que «me olvido de la lesión. En los entrenamientos y en los partidos mucho más. Me es más incómodo en el día a día en mi casa que dentro del campo. No le dedico atención al dedo. Si se rompe, se rompe».
Augusto, de hecho, asegura que está deseando calzarse las botas y jugar en Villarreal: «A uno nunca le gusta estar fuera por lesión. Pero no siendo portero, es peor por un dedo de una mano. Porque tú te sientes bien de piernas, quieres correr y jugar y no puedes por un dedo. Tengo tres hijos que demandan de este dedo también y tengo que prestarle atención. Si no juego, soy bastante pesadito en casa«.
El capitán, por otra parte, cree que al Celta le espera un exigente duelo en El Madrigal este domingo. «Es un lindo partido porque jugamos contra el líder, un rival que juega muy bien y que viene afianzándose en una idea desde hace mucho tiempo y aunque cambie jugadores tiene una base y una línea de juego. Tenemos que estar al 100 % en cada aspecto, defensivo y ofensivo. Cada detalle te cuesta muy caro. Es un lindo desafío«.
El Celta se enfrentará de manera consecutiva con los dos únicos equipos que consiguieron ganarle los dos encuentros la temporada pasada. Augusto se lo toma como un reto: «Villarreal y Real Madrid fueron los dos únicos equipos que nos ganaron los dos partidos, pero el fútbol te da revancha siempre. Es anecdótico pero nos deja como enseñanza que son equipos fuertes, que saben lo que quieren y que para ganar necesitamos nuestra mejor versión«.