La actual delimitación oficial recogida por el Instituto Geográfico Nacional data del año 1945 y no satisface a ninguna de las partes en determinados trechos. En el caso de Nigrán, estos errores e imprecisiones en la cartografía oficial afectan, entre otros, a los núcleos de Outeiro o Castelo (en la parroquia de Parada), zonas que ahora el consistorio tratará de «recuperar».
«El objetivo es acordar unos límites que se correspondan de verdad a la realidad física y, por lo tanto, contenten a ambas partes dando por zanjadas las desavenencias históricas», explica Juan González, alcalde de Nigrán. Así, con el fin de ajustar los nuevos lindes a la realidad oficiosa, el Concello mantendrá a partir de hoy una serie de reuniones con vecinos y comunidades de montes afectadas (Parada y Chandebrito) para trasladar después su propuesta a Gondomar. «Los nuevos límites que propondremos serán los que nos trasladen los propios vecinos y entidades de forma justificada y acorde a la realidad histórica; sin su participación en el proceso no se podría hacer», explica.
El trabajo para llegar a un acuerdo quedó pendiente desde el año 1996 que se tratara de retomar. Sin embargo, actualmente existe una clara voluntad por ambas partes para darle solución, con la ventaja añadida de que los dos municipios cuentan con la misma empresa redactora del PGOM (Eptisa), lo que permitiría agilizar el proceso para que figure el nuevo deslinde en los respectivos documentos urbanísticos. Finalmente, ya en el PGOM, el Instituto Geográfico Nacional debería dar el visto bueno al acuerdo alcanzado.