Por ello, la Concejalía ha pedido al cuerpo municipal que “ejerza a partir de esta semana una mayor vigilancia que permita sancionar este tipo de conductas incívicas” con el fin de que “esta práctica se extinga”.
El Concello califica de “grave” estos “olvidos” de los dueños y recuerda que la Ordenanza Reguladora de la Circulación de Perros por las vías y espacios públicos “limita” la acción de los animales en la calle.
“Los poseedores de estos animales deberán cuidar de que no ensucien las calles y espacios públicos con sus deposiciones. En el caso de que estas se produzcan, están obligados a limpiar los excrementos de forma inmediata desde el punto de vista higiénico”, enfatizan desde el consistorio.