Ya este miércoles a mediodía el departamento autonómico, a través de los partes que emite periódicamente, publicó que el área metropolitana olívica ya no sufría ningún incendio activo, es decir, que ardiendo sin control. En el peor de los casos se encontraban estabilizados –con llamas pero propagándose de forma controlada-, según la catalogación oficial.
La labor de los efectivos contra incendios y la lluvia caída en los últimos días han hecho posible este avance en los montes de la comarca, de tal manera que este jueves ya se había clasificado como controlados –ardiendo pero sin propagación- los fuegos de Traspielas (Fornelos de Montes), Budiño (Salceda de Caselas), Parada (Nigrán), Pesqueiras (Salvaterra de Miño), Morgadáns (Gondomar), Padróns, Guláns y Guillade (Ponteareas), Riofrío (Mondariz), Petelos (Mos), Baíña (Baiona), As Neves y A Guarda.
Según ha informado la Consellería, a mediodía de este jueves Galicia sólo registraba un fuego, el iniciado en el municipio lugués de Cervantes, concretamente en la zona de Noceda, que se encontraba “controlado”.