Según han confirmado a VIGOÉ fuentes cercanas al caso, el acusado se derrumbó durante el segundo de los registros, cuando ya se encontraron en su domicilio diferentes pruebas incriminatorias, entre ellas unas mantas que presuntamente utilizó para envolver el cadáver. Ante esta situación, acabó admitiendo su autoría ante los agentes.
A partir de ahí, se ha mostrado colaborador a la hora de aportar datos e información acerca de lo ocurrido. Está previsto que pase a disposición judicial a partir de este sábado. El Juzgado de Instrucción número 8 de Vigo es el que entiende del caso.