La investigación se inició el pasado mes de septiembre, cuando un varón llamó a la Sala Operativa del 091 para denunciar que había sido víctima de una estafa, según informó este martes la Comisaría de Vigo
Al realizar las primeras comprobaciones los agentes vieron que la víctima era un vendedor de cupones de Redondela, al cual se le había presentado un hombre que se identificó como el propietario de un local cercano y le pidió cambio en monedas y billetes pequeños, entregándole el vendedor 500.
Pasados unos minutos, y al ver que éste no volvía, se dirigió hacia el local para preguntar por el propietario, descubriendo que había sido víctima de un engaño. Además los investigadores descubrieron que ese mismo día había engañado a otro vendedor de la zona con el mismo método, si bien en este caso el importe había sido menor.
Este segundo hecho permitió a los agentes identificar un vehículo que podría estar siendo utilizado por este varón, y que les condujo hasta otra estafa que tendría lugar a finales del pasado mes en Bueu.
En este caso la víctima fue abordada por un varón que dijo ser el propietario de una tienda de telefonía, tras lo cual le pidió varios cupones y le preguntó si tenía cambio, respondiendo el vendedor de modo afirmativo, al tiempo que le entregaba al estafador 1.000 euros.
Posteriormente, volvería a actuar en Vigo, primero en Pizarro y días después en el Calvario, y al igual que en los casos anteriores se acercó a los vendedores como propietario de un bar de la zona que necesitaba cambio, haciéndole entrega los vendedores de un dinero que nunca volvieron a ver.
En este caso la investigación estaba muy avanzada y los agentes habían logrado identificar al responsable de los hechos, por lo que una vez localizado procedieron a su detención y traslado a dependencias policiales.
Al realizar una consulta de las bases de datos descubrieron que ya había sido detenido en el año 2008 haciéndose pasar por capitán de salvamento marítimo para estafar a desempleados, a los que convencía previa entrega de dinero, de que les podía conseguir trabajo.
Además se confirmó que el Juzgado de Redondela le había imputado en su día varias estafas cometidas en Pontevedra, Madrid, Almería, y otros puntos de la geografía. La investigación fue llevada a cabo por el Grupo de Policía Judicial de la Comisaría de Distrito Centro, dependiente de la Comisaría de Policía Nacional de Vigo-Redondela.