Según ha informado este martes el cuerpo municipal, una patrulla tuvo que acudir esta pasada noche a un piso de la calle María Auxiliadora, donde una mujer, que llevaba en brazos a un bebé de dos meses, les contó al recibirles que poco antes había comenzado a discutir con su pareja -con el que convive y mantiene una relación sentimental, fruto de la cual tuvieron el pequeño que sostenía- porque él estaba consumiendo cocaína en casa y, tras recriminárselo ella, se puso muy violento, comenzando a gritarle con insultos y amenazas para a continuación tirarle objetos que había en la vivienda mientras tenía en brazos al bebé.
Según relató, uno de los objetos impactó contra ella en el pecho, a escasos centímetros de la cabeza del niño, por lo que se refugió en una habitación, desde donde pudo llamar a la Policía Local. Sin embargo, casi al instante, él también entró, quitándole el teléfono móvil de sus manos y rompiéndolo al lanzarlo de forma violenta contra el suelo.
A continuación cogió otro terminal que tenía entre sus pertenencias y el teléfono inalámbrico de la vivienda para acto seguido ausentarse del domicilio.
Los agentes pudieron comprobar que efectivamente en el interior de la vivienda había múltiples objetos por el suelo y que la víctima presentaba un hematoma en el lugar indicado.
Poco después, mientras todavía los agentes dialogaban con la víctima sobre lo sucedido, llamó al telefonillo del piso el sospechoso, por lo que los policías bajaron a la calle y tras identificarlo procedieron a su detención. El hombre, “en actitud muy agresiva”, según el cuerpo municipal, repitió “en numerosas ocasiones frases insultantes y amenazantes contra la víctima”.