Según informó la Comisaría de Vigo, la investigación se inició a mediados del pasado mes de mayo, cuando una mujer de 78 años de edad se presentó en dependencias policiales para denunciar que durante los últimos meses le habían desaparecido diversas joyas y dinero de su domicilio.
En una primera comprobación los agentes verificaron que no había síntomas de forzamiento en los accesos de la vivienda, por lo cual sospecharon que el responsable de los hechos tendría que ser alguna persona cercana a la víctima.
Después de descartar a sus diferentes círculos descubrieron que la empleada de hogar había visitado varios locales de compra-venta de joyas y de objetos de segunda mano, por lo que centralizaron la investigación sobre ella.
Tras analizar toda la documentación depositada en estos establecimientos localizaron una decena de contratos de venta de joyas a nombre de esta mujer. El primero de ellos databa de noviembre del pasado, justamente cuando la sospechosa había comenzado a trabajar para la víctima, y el último correspondía a mayo del corriente año.
Los investigadores procedieron a la localización y detención de esta mujer. Una vez en Comisaría se le tomó declaración policial al tiempo que se realizaba una consulta de las bases de datos, en las que se comprobó que la detenida carecía de antecedentes policiales anteriores.
La investigación fue llevada a cabo por agentes del grupo de UDEV-Robos de Vigo, pasando la detenida y todo lo actuado a disposición del Juzgado de Instrucción número 7 de los de Vigo en funciones de guardia.