El vehículo rebasó la indicación, invadió un cruce y cuando se percató de la presencia de la dotación policial frenó bruscamente, quedándose parado sobre un paso de peatones. Los agentes le pidieron la documentación y al hablar con el conductor se dieron cuenta de que presentaba síntomas de haber consumido recientemente algún tipo de sustancia estupefaciente.
El test de drogas arrojó un resultado positivo en anfetaminas, opiáceos y cocaína. Además, se le realizó un cacheo corporal y una revisión de sus pertenencias que permitieron localizar una botella de plástico con líquido preparado para enjuagar la boca antes de una prueba de drogas, con el objetivo de evitar la detección del consumo. Asimismo, se le descubrieron una pastilla de metadona y papel de plata, empleado para el consumo de heroína, que todavía mostraba restos de esa sustancia.