Las chicas aseguraban haber observado cómo los dos presuntos autores del hurto cacheaban a la persona dormida, le quitaban un teléfono y una cartera y luego huian del lugar en dirección a un local cercano.
La víctima del hurto era un vigués de 21 años, que confirmó a la patrulla no haberse dado cuenta de nada y echar en falta un tarjetero con documentación y un teléfono de un color y marca concreto.
Las testigos informaron de las características físicas de los presuntos autores, que fueron localizados en las cercanías y que al percatarse de la presencia de la policía se dirigieron al aparcamiento de vehículos.
Uno de los agentes pudo ver cómo uno de los individuos dejaba bajo un coche algún objeto, que resultó ser un teléfono de la misma marca y color que el robado. Además, al segundo sospechoso se le halló una tarjeta del Concello de Vigo a nombre de la víctima, que hizo constar que presentaría la oportuna denuncia.