Es una lástima que el Concello y la Xunta de Galicia no se pongan de acuerdo para aprovechar las instalaciones de la antigua estación de autobuses de la Avenida de Madrid, en Vigo.
Las discrepancias entre ambas partes conllevan un abandono que se empieza a hacer notorio, perdiendo la oportunidad de hacer algo positivo para un barrio muy poblado y muy necesitado de instalaciones públicas.
¿Por qué no llegar a un entendimiento, a un término medio, y unificar ambos proyectos? No se trata de que ninguna parte gane políticamente más que la otra, se trata, simplemente, de que salga ganando el propio barrio y toda la ciudad de Vigo antes de que todo eso sea una ruina.
