Eso sí, Vigo tiene un par de motivos como consuelo. Por un lado, está escapando de los datos bajo cero que sí están viviendo en zonas del interior de Galicia. Por otro, la previsión de Meteogalicia habla de máximas altas (16º) para la época del año que es, con el sol siempre presente y ayudando a que la sensación térmica durante el día mejore.
A medio y largo plazo, el pronóstico indica que los cielos se mantendrán despejados y los termómetros seguirán oscilando en baremos como los actuales, con ascensos muy ligeros.