El motivo: que el avión que les tenía que llevar hasta El Prat no estaría disponible al haberse suspendido la salida de la ruta inversa, desde la terminal catalana hacia la capital portuguesa.
Ahí empezó para este grupo de viajeros una odisea que recoge este lunes el blog aeropuertodevigo.info. Según relata el portal, la aerolínea trazó un plan alternativo para acomodar a sus usuarios, que pasaba por recolocarlos en un vuelo desde Oporto, el último que despegaba desde Sá Carneiro ese mismo domingo. Así, el personal de la compañía inició las gestiones para transportar por carretera a los afectados.
Sin embargo, estos se toparon con un segundo inconveniente. El vuelo VY/VLG8482, que tenía llegada programada a Oporto a las 21:30 horas y que debía operar el posterior regreso a Barcelona nunca llegó a tomar tierra en el aeropuerto portugués, sino que tras despegar de El Prat no pudo tomar tierra en el Sá Carneiro debido al mal tiempo y fue desviado a Vigo.
De nuevo, los viajeros se vieron abocados a un nuevo viaje en autobús, esta vez rumbo a España. He aquí el tercer problema: Peinador no abre a partir de la medianoche, un factor que quizás los responsables de Vueling no supieron medir, ya que a su llegada al aeródromo olívico, ya de madrugada, los pasajeros se encontraron con la terminal cerrada.
Con este panorama, la aerolínea tuvo que hospedar en hoteles de la ciudad a sus clientes, que acabaron haciendo noche en Vigo. Por si fuera poco, la esperanza de ser reubicados en el primer vuelo de la mañana (09.55 horas) se esfumó ante la falta de plazas.
Finalmente, la compañía programó un nuevo vuelo que partió de Peinador a las 13:40 horas de este lunes, casi 16 horas más tarde de lo indicaba su teórica salida, que acabó produciéndose desde otro país, al día siguiente y tras pisar tres aeropuertos diferentes.