El broche a esta sucesión de inconvenientes para los usuarios ha llegado este mismo jueves, día en el que cinco aviones no han podido aterrizar en Peinador y han sido desviados a Lavacolla, trastocando asimismo la salida de los viajeros que tenían que partir a continuación desde la terminal olívica. Así, en total, diez vuelos afectados por la ausencia del ILS.
Todo esto sin que mayo haya sido un mes especialmente malo meteorológicamente hablando –sólo ocho días con lluvia y varios con cielos totalmente despejados-. Aun así, el balance supera al caos registrado entre abril y junio de 2015, cuando el ILS había sido desconectado para cambiar las antenas y adaptar el aeropuerto a la normativa europea. Por aquel entonces se habían producido 62 desvíos, según recuerda el citado blog.
Habrá que ver cómo evoluciona la situación durante el mes de junio, ya que está previsto que los trabajos continúen hasta el próximo jueves día 28. Cabe recordar que además de los vuelos comerciales, se ha prohibido que operen vuelos de instrucción y publicitarios. Además, se han producido desvíos de vuelos de carga de mercancías y de otras operaciones como ambulancias aéreas.