Así, los vehículos ligeros y pesados que circulen por esta autopista –y también por la AG-55 (A Coruña-Carballo), la otra de titularidad gallega- entre las 00.00 y las 06.00 horas obtendrán una rebaja del 50% en el coste del peaje. Esta medida ya había sido propuesta por el Ejecutivo gallego hace meses y ahora se ha decidido ponerla en práctica. Se calcula que se aplicará a unos 200.000 viajes al año.
La decisión podría repercutir en un incremento del uso de estas infraestructuras y, por lo tanto, en una reducción del tráfico en carreteras secundarias, con el consecuente aumento de la seguridad para los conductores. Feijóo también ha defendido este “paso” por la actividad económica que existe entre Vigo y el Val Miñor.
Además, ha pedido que este modelo se extrapole a la AP-9, la vía de alta capacidad más importante de Galicia que en este caso depende del Ministerio de Fomento y cuyas tarifas están entre las más caras de España.