Por este motivo, Fidalgo Iglesias se cuestionó por qué los vigueses pagan más de lo que deben, señalando que lo hacen “única y exclusivamente porque al alcalde y a este desgobierno municipal le interesa estar a bien con Aqualia”.
«La concesionaria está realizando una serie de obras en la ciudad que luego dicen que son a coste a cero. Y no, no son a coste cero. Los vigueses pagamos dos veces esas obras: a través de los impuestos municipales y a través del recibo del agua que nos llega cada dos meses”, puntualizó.
Fidalgo tachó de “escandaloso” este comportamiento, al tiempo que reiteró que el Partido Popular seguirá dando “la batalla para que los vigueses paguemos por el agua que consumimos y no por los caprichos de dinosetos, obras y mobiliario urbano de este desgobierno”, que deberían abordarse con cargo al presupuesto municipal.
En este marco, el concejal popular adelantó que su grupo presentó una moción, a debatir en el pleno del lunes, en la que insta el Gobierno municipal a cobrar por lo que realmente se consume. Una moción, prosigue, en la que también se va a solicitar una auditoría de Aqualia con un doble objetivo: saber si las obras que se están haciendo con cargo al plan de inversión de la prórroga del servicio hasta el año 2020 se están ejecutando y cuánto están costando; y también auditar el contrato que tiene Aqualia con los ciudadanos de Vigo.
“Este es un contrato muy sustancioso y queremos saber los costes y los beneficios reales. Aqualia está facturando alrededor de 50 millones de euros a los ciudadanos. Queremos saber, si esos son los ingresos, cuáles son los costes del servicio, para conocer si Aqualia está ganando o perdiendo dinero con Vigo. Y, si está ganando dinero, cuánto está ganando”, ahonda Fidalgo.
Paralizar la subida prevista
Asimismo, el edil popular insistió también en la necesidad de paralizar la subida planteada del 2,1% en el precio del agua para el 2017. Una petición formulada por su grupo en las enmiendas a las ordenanzas fiscales y que, ante el rechazo a las mismas, también figura en la moción a debatir este próximo lunes.
“No tiene sentido subir el precio del agua un 2,1% cuando Vigo tiene una de las aguas más caras de Galicia y de España. Y menos aún, si cabe, considerando que estamos en un escenario en el que el IPC interanual presenta valores negativos del 1,1%, lo que significa que, en términos reales, la subida llega al 3,2%”, concluyó.