El edil del PP ha contrapuesto esta “fiebre de la contratación” a la forma de gestionar habitual del gobierno. Así, frente a los más de 25 millones liberados en estos días, Fidalgo ha situado los 60 millones en contratos formalizados por el ejecutivo durante todo el año 2017. Un escenario en el que ha vaticinado, a partir de ahora, un “nuevo parón y una sequía en las adjudicaciones”.
En este contexto, ha calificado lo ocurrido como un “coladero” que ha llevado a sacar a concurso contratos que “no tenían ninguna prisa ni justificación”. Entre ellos, el concejal ‘popular’ ha destacado el Belén de Navidad de 2018. “¿Qué sentido tiene haberlo sacado a concurso casi un año antes de las fiestas?”, se ha preguntado.
Además, los aparcamientos de Castelao y Jenaro de la Fuente se han sacado a concurso pese que el Gobierno local tiene recurrida la actual concesión en los tribunales. “Antes de saber cuál va a ser el resultado de esos recursos, con prisas y para saltarse la ley, sacan los vuelven a sacar concurso”, incide.
“Ya se sabía quién iba a ser el adjudicatario”
En este contexto, el concejal ha mantenido que con la nueva norma no habrá tanta libertad y sí que habrá “mucha más transparencia”. No en vano, detalla, “aquí muchas veces ya se sabía quién iba a ser el adjudicatario antes de la adjudicación”.
“Ojalá mostrasen esta diligencia todo el año para otros asuntos. Pero mucho nos tememos que no va a ser así”, ha continuado Fidalgo, quien ha explicado que con la nueva ley de contratos habrá un mayor número de empresas que intenten contratar con las administraciones públicas, muchas de ellas pymes.
Una accesibilidad y una transparencia que, según apunta, invitaba a pensar que “lo lógico hubiese sido hacer todo lo contrario y esperar a que entrase en vigor” la norma para facilitar e impulsar el acceso a la contratación pública de esas empresas.