Así, los empleados del servicio de Xestión do Estacionamento Regulado (XER), que confiaban en tener un laudo favorable de la Inspección de Trabajo, iniciarán un nuevo paro para intentar por esta vía que los ocho compañeros despedidos el 30 de julio sean readmitidos.
Además, exigen al Concello de Vigo que “le retire la adjudicación a la empresa de forma inmediata” dado que desde el Ayuntamiento “tienen conocimiento de todo lo que está pasando”. “Hay unos incumplimientos graves del pliego de condiciones y pueden retirarle la concesión si quieren”, argumentan fuentes sindicales, que recuerdan que el alcalde, Abel Caballero, ya amenazó con ello.
Los trabajadores también acudirán al pleno ordinario de este miércoles e intervendrán en él. Tomará la palabra uno de los despedidos, Luis Cordovés, que fue delegado sindical durante muchos años y recibió la noticia de su destitución dos meses después de expirar el año de protección de despido que contempla la ley para los representantes sindicales.