Diego Lores, tal y como avanzó «VIGOÉ» el pasado mes de febrero, está acusado por atentado contra la autoridad y lesiones durante los altercados ocurridos el 7 de enero de este año. Hace unos días, el agente de la Policía Local que resultó lesionado entonces ratificó su declaración respecto a los hechos.
Este miércoles, el cura Emilio Suárez defendió a Lores y señaló que no vio ninguna de las agresiones de las que está acusado y cree que la Policía se confundió al identificar al imputado.
La detención se produjo casi un mes después a raíz de la detención de otro compañero Xurxo Romero, condenado a 1 año de prisión por aquellos incidentes. Fue el 8 de enero cuando es llamado desde Comisaría e identificado por uno de los agentes de la Policía Local herido el 15 de diciembre. Las pruebas que aporta la Policía, además del reconocimiento fotográfico, son vídeos y fotos de aquel día. Por su parte, la defensa insiste en que no hubo ningún tipo de agresión.
«No tiene sentido que lo identifiquen veinte días después cuando Diego estuvo durante todo ese tiempo en la rotonda y los policías lo veían a diario allí, lo habrían reconocido. Es más, ya había sido identificado y le habían pedido el DNI los primeros días, al igual que al resto de los vecinos», asegura Esther Loira, letrada del joven. Es consciente de que este tipo de causas son habituales y «ellos siempre tiene las de ganar», pero confía en que los agentes den marcha atrás y no se formule acusación ni se llegue a la vista oral.