Ya antes, a la altura de Vía Norte, desde donde media hora después debía de partir la marcha de UGT y CCOO, se produjo el primer enfrentamiento. Al grito de «¡Vendidos!» y «¡Traidores!», los trabajadores de Xustiza recriminaron el pacto que habían alcanzado a sus espaldas con el vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda.
Sus diferencias quedarían de manifiesto poco después, cuando los mismos funcionarios judiciales esperaron a la manifestación de UGT y CCOO en La Farola de Urzaiz. Allí, formaron en fila y de espaldas para demostrar su rechazo a las negociaciones que habían mantenido estos dos sindicatos con la Xunta.
En el mismo sitio esperaron a la llegada de los manifestantes convocados por la CIG, con los que se intercambiaron aplausos y a los que se unieron. «Ante la indiferencia, resistencia» o «aquí está, aquí se ve la justicia gallega en pie» fueron algunos de sus cánticos.