“Sigo recibiendo facturas de 10, 15, 20 euros por aparcar en el hospital, se está esquilmando a los ciudadanos, parece que cada vez que alguien entra en el aparcamiento está comprando la 5ª Avenida”. Abel Caballero anunció este jueves que el Concello pondrá en marcha medidas de apoyo para que los usuarios del Hospital Álvaro Cunqueiro puedan aparcar con seguridad en la zona.
El regidor socialista aseguró en declaraciones a los medios de comunicación que el próximo verano estará ya en funcionamiento el primer aparcamiento municipal de 500 plazas junto al centro hospitalario. También adelantó que la segunda actuación, para otros 500 vehículos, requerirá más tiempo al ser necesario un desmonte de la parcela. “Quitar la tierra puede requerir entre diez y doce meses”, señaló respecto a esa segunda fase.
En cualquier caso, el alcalde avanzó que dará todo tipos de facilidades a los conductores y consideró lógico que haya “tolerancia” en la zona a la hora de estacionar. “La gente aparca a la brava y habrá que tomar alguna medida para ofrecer garantías de seguridad y apoyar a los que van allí”, señaló.
Caballero mostró sus dudas sobre la obra realizada por la concesionaria en el entorno del hospital, especialmente en la glorieta de acceso desde la Avenida Clara Campoamor (Subida al Cuvi) hasta el centro médico. “Tengo dudas de que la rotonda tenga las medidas de seguridad y por lo que he visto allí habrá accidente asegurado”, mantuvo.
Además, insistió en que el hospital “es una estafa” y señaló que seguirá demandando la instalación de un laboratorio central de referencia.
El PP pide «medidas urgentes»
El día anterior, la portavoz del PP de Vigo, Elena Muñoz, había exigido al alcalde “medidas urgentes” para resolver los problemas de circulación registrados en viales con alta densidad de tráfico como la Avenida de Castrelos, utilizados como uno de los accesos principales al complejo hospitalario.
“Es ya hora de que acabar con esa política de brazos cruzados en la que está instalado este gobierno municipal; con esa política de culpar a todos menos a uno mismo y que consiste en no ejercer las competencias a las que está obligado como responsable máximo de Vigo”, precisó Muñoz Fonteriz.