Diecisiete votos en contra, los del PSOE, y ocho a favor, de PP y Marea de Vigo. Este fue el resultado de la moción presentada este lunes en el pleno municipal ordinario del mes de noviembre. El PP llevaba a la sesión una solicitud para que la zona de la Alameda y Montero Ríos fuesen protegidas contra el botellón, pero el gobierno local rechazó la propuesta y avanzó que solucionará el problema “como ya hemos hecho antes” en otras zonas.
Miguel Fidalgo destacó que los fines de semana los vecinos “sufren una pesadilla” al reunirse cientos de jóvenes provocando “ruidos insoportableS”. “Orines, vasos rotos, vómitos… es un auténtico infierno, a las cinco de la mañana siguen los gritos, es un sinvivir. Hay que prohibir el botellón”, destacó el concejal “popular” durante su intervención para añadir que también se producen graves daños a bienes públicos y privados. “Llevamos años pidiendo que se ponga freno a este descontrol”, aseguró.
Desde Marea de Vigo, el portavoz Rubén Pérez se negó a “facer un discurso demagogo, a situación na Praza de Compostela é intolerable, se o resolvemos cunha zona de especial protección, estaríamos dacordo, o problema é como resolver a presencia do botellón, porque cando convertimos as rúas nun lugar de barra libre, con locais e terrazas para o consumo de alcohol, como lle vamos a recriminar aos mozos”.
Carlos López Font, concejal de Seguridad, acusó a Fidalgo de “crear alarmismo” e indicó que el gobierno local resolvió “la herencia del botellón” que se había extendido por toda la ciudad. “El problema es que nos dejaron una ciudad llena de botellones, saque las fotos de la Praza da Estrella cuando gobernaba Corina Porro”, señaló el edil socialista.
En nombre del gobierno, Font destacó el trabajo realizado por la Policía Local a la hora de concienciar a los jóvenes ante el consumo del alcohol, así como la labor de inspección de ruidos. “Vamos a solucionar este problema, lo trataremos como se debe, igual en la Praza de Compostela que en otras zonas”, señaló.
En la última intervención, Fidalgo destacó que el Concello “no ha solucionado el problema del botellón, sino que lo ha cambiado de sitio, antes era en Lóriga y Teófilo Llorente, ahora en la Alameda y Monterio Ríos”. El concejal del PP realacionó el problema con la “falta de actividades de ocio” en la ciudad. “Tiene que pasar en Vigo una desgracia, como la ocurrida la semana pasada en Madrid”, dijo antes de solicitar el número de sanciones en base a la ordenanza.