Un hotel que fue inaugurado el 29 de agosto de 1968 por el ministro de Turismo, Manuel Fraga y que cerraba definitivamente sus puertas en marzo de 2016.
La intención ahora es construir uno que genere menos impacto visual, de sólo cuatro alturas y con una distribución más horizontal. Se pone así fin a un “error histórico” del urbanismo vigués.
Una vez finalizados los trabajos, Attica 21, empresa que adquirió el inmueble, iniciará las obras para levantar el nuevo establecimiento hotelero, que mantendrá las 4 estrellas.
Se habilitarán 125 habitaciones -diez menos que antes-, piscina, spa, sala de convenciones y unas cien plazas de aparcamiento. Para hacerlo realidad, la cadena invertirá casi 21 millones de euros.
El plazo máximo para ejecutar la demolición del actual hotel y construir el nuevo es de 30 meses, por lo que la apertura de puertas del complejo se estima para el año 2021.