Estas firmas y pintadas sin sentido proliferan en diferentes localizaciones de la ciudad de Vigo, y, a decir verdad, también de otras poblaciones.
A los autores igual les da que sean paredes, portales, verjas de establecimientos comerciales o entradas de garajes. En la fotografía puede observarse un rincón que corresponden a la reciente humanización de la Avenida das Camelias. En un futuro es posible que se abra por allí mismo alguna conexión con la Avenida da Hispanidade. La pared y el entorno de ese rincón estaban pintados de un blanco impoluto, con unas plantas decorativas que lo embellecían, de no ser por unos desaprensivos que han manchado las paredes con sus símbolos. Es obvio que no entienden de arte más allá de lo que son sus firmas absurdas e ilegibles y, sin embargo, deberían ser identificables a la vista de la policía para terminar dándoles alcance y hacerles pagar por los desperfectos.