Según ha indicado la organización, la integración a partes iguales de ambas firmas permitirá combinar la fortaleza de Fiat en América y la de PSA en Europa, abriendo nuevas oportunidades de negocio. “Esto es una buena noticia para Asime, para el sector metal gallego y especialmente para las empresas de automoción, metalmecánica y transporte, que podrá provocar más presencia de nuestras empresas en proyectos de automoción y abrir nuevas oportunidades para el sector», añaden.
Asimismo, Asime ha destacado la “importancia de contar con grupos fuertes que puedan mejorar su economía de escala y hacer frente a los nuevos retos que presenta la movilidad del futuro, como el coche eléctrico, conectado y autónomo”.
Por su parte, los sindicatos han vuelto a lamentar la falta de información que tienen. Aunque celebran la promesa de no cerrar fábricas desconocen si habrá consecuencias directas sobre el personal, ya sea en forma de reducción de puestos de trabajo o en empeoramiento de las condiciones laborales.
Todo ello, está generando cierta incertidumbre entre los empleados. Así pues, los representantes sindicales se mantienen a la expectativa de las decisiones que pueda tomar el grupo y, sobre todo, de las sinergias que se creen entre las dos empresas.