Los empleados del Celta han montado en el museo del club un peculiar santuario en honor a «San Iago Aspas» para que no recaiga de su lesión. Bajo la figura de cartón del delantero moañés se puede encontrar todo tipo de dedicatorias, algunas de ellas muy exóticas, como un buda chino, y otras más de la tierra, como los ajos o la botella de Estrella. Todo para que este sábado, el jugador saque a su equipo de la mala racha que lo ha llevado hasta las últimas plazas de la clasificación. Todo el celtismo confía en su futbolista estrella.