«La clave de la derrota fue el penalti, que condiciónó el partido y metió a Las Palmas en el encuentro. El penalti es injusto porque la mano es involuntaria», explicó el lateral en zona mixta a la conclusión del encuentro.
El céltico fue muy duro con el colegiado. «A parte del penalti, el árbitro estaba deseando echar a Fabián a la calle. Nosotros no protestamos la jugada y él fue directo a sacarle la tarjeta roja. No nos dejaba ni abrir la boca. Creo que merecemos un respeto por parte de los árbitros. Y respecto a las manos, deberían ponerse todos de acuerdo, o se pitan o no se pitan, pero no unas sí y otras no», aseguró.
Por otro lado, Jonny también reconoció errores. «Nos encontramos a un rival muy fuerte. Es cierto que era lo que esperábamos y que ellos controlaron el balón mucho mas tiempo que nosotros. En la segunda parte ellos nos metieron en nuestro campo, porque dominaron el balón y eso hizo que perdiéramos un punto», dijo.
Jonny, al igual que el resto de sus compañeros, se centra ya en la ilusionante eliminatoria de Copa ante el Sevila: «Ahora solo nos queda regresar a Vigo, descansar y pensar ya en la eliminatoria de Copa, una competición en la que hemos puesto grandes ilusiones».