Este será el partido número 148 de Berizzo en el banquillo del Celta. Y será también el más triste. El entrenador abandona el equipo con el que ha triunfado estas últimas tres temporadas y con la sensación de que su ciclo no había terminado todavía. El argentino aseguró este sábado que «hice mucha fuerza por quedarme», pero no logró llegar a un acuerdo con la directiva para sellar su renovación.
Parece que el celtismo está con Berizzo y que da por buena su versión de los hechos. Los ánimos están muy encendidos contra Carlos Mouriño y su directiva y, de hecho, este sábado ya se estaban preparando protestas.
El partido ante la Real, en el que el Celta no se juega nada -como en los últimos de Liga- , debería haber servido para que la afición homenajease a unos jugadores que han hecho historia alcanzando esta campaña las semifinales de la Copa del Rey y la Liga Europa. Seguro que estos serán aplaudidos por la hinchada celeste, pero esta no será la imagen del encuentro porque las miradas estarán puestas en el palco.
Hasta ahora, el club ha guardado silencio. De hecho, la única reacción ha sido por medio de un comunicado en la página web de agradecimiento al técnico. Carlos Mouriño ni siquiera asistió en la noche de este sábado a la cena de las peñas, como suele ser habitual. Ricardo Barros, sí presente, no mencionó a Berizzo ni a su marcha en su discurso.
En lo estrictamente deportivo, se espera que en este último partido Berizzo utilice a sus jugadores titulares. Eso sí, no podrá contar con Hugo Mallo, sancionado, ni con Radoja, que no se ha recuperado a tiempo de unas molestias en el tendón de aquiles. Tampoco han entrado en la lista por decisión técnica Rubén Blanco, Beauvue, Bongonda y Planas. Este último concluye contrato y toda hace indicar que no va a seguir en Vigo. No se podrá despedir desde el césped.
Los jugadores del Celta, que acumula una racha de seis derrotas seguidas en Liga, querrán brindarle una última victoria a Berizzo y a su afición, pero no lo tendrán fácil porque la Real Sociedad necesita ganar para asegurarse su clasificación para Europa. Curiosamente, al frente del equipo donostiarra llegará Eusebio Sacristán, un extécnico del Celta al que Mouriño tampoco renovó en su día.
Alineaciones probables:
Celta: Sergio Álvarez; Roncaglia, Cabral, Fontás, Jonny; Wass, Tucu Hernández, Jozabed; Iago Aspas, Pione Sisto y Guidetti.
Real Sociedad: Rulli; Odriozola, Iñigo Martínez, Aritz, Yuri; Illarramendi, Zurutuza, Xabi Prieto; Vela, Juanmi y Willian José.
Árbitro: Sánchez Martínez (Comité Murciano).