El llamamiento es claro por sí mismo y por cómo se produjo. Monchi pronunció estas palabras al término de la presentación de Fazio como nuevo fichaje del conjunto andaluz. Al término, literalmente. La rueda de prensa ya había concluido cuando el secretario técnico pidió expresamente la palabra para solicitar la ayuda de los medios a la hora de difundir ese mensaje al sevillismo. En la capital andaluza conocen la expectación que ha generado la cita entre el celtismo y no quieren quedarse atrás. «Las últimas doce finales de un equipo sevillano las jugó el Sevilla», incidió.
Por ahora, parece que los movimientos que se están llevando a cabo desde Nervión están surtiendo efecto, puesto que en la tarde previa al partido quedan disponibles menos de 4.000 entradas, cifra inferior al 10 por ciento del aforo del Sánchez Pizjuán. Hoy es el último día de plazo para que cada socio pueda retirar una entrada para un acompañante por 15 euros –los precios para el público general oscilan entre los 25 y los 60 euros-. Además, cada asistente se llevará de regalo una bufanda conmemorativa del partido. Y para que la hinchada no le quite importancia a la cita debido a los éxitos cosechados en la última década, el club ha activado en las redes sociales el lema #NosJugamosOtraFinal.
El Sevilla es consciente de la importancia del partido y de que sus seguidores tendrán que hacer valer su apoyo en el partido de ida, puesto que apenas tendrán representación en la grada de Balaídos. El Celta pondrá a disposición del equipo visitante entre 200 y 300 localidades por culpa de las obras del estadio, algo que ha sido asumido con resignación por parte de la entidad andaluza, que ha proporcionado 250 entradas en el Sánchez Pizjuán para los seguidores celestes.