Carlos Mouriño, presidente del Celta, hizo este anuncio el pasado domingo en la convención de peñas del club al ser cuestionado por un peñista al respecto. Eso sí, los aficionados que quieran ser abonados de Preferencia la próxima campaña y no lo hayan sido en esta, sí que tendrán que pagar más.
Con la reforma de la grada, los espectadores ganan en visibilidad. De hecho, el nuevo graderio parte de Tribuna, por lo que algunos asientos gozarán de una localización inmejerable para seguir los partidos. La grada, además, se ha acercado al terreno de juego y en su zona central se instalará la boca del túnel vestuarios.
Se espera que las obras de remodelación de la grada finalicen la próxima semana. No obstante, Preferencia permanecerá tapada por la lona durante el partido del sábado 23 ante el Espanyol, con el que el Celta cerrará este curso, por motivos de seguridad. Los trabajos comenzaron en la segunda quincena de febrero. El partido ante el Atlético de Madrid que se jugó el día 15 de dicho mes fue el último en el que los abonados de Preferencia se sentaron en su grada. Posteriormente, fueron reubicados en las gradas de Río Bajo y Río Alto, destino que mantendran en este último partido de Liga.