El fichaje más inminente es el de futbolista nórdico, que firmará en las próximas horas su cesión hasta junio. El Celta se reserva una opción de compra cuyo importe todavía no ha trascendido. Valga como referencia que el pasado verano le costó a su actual club siete millones fijos más uno en variables.
El danés, ex del Betis, competirá por un puesto en la banda con David Juncà, cuyo rendimiento está siendo cuestionado. Durmisi, que acaba de cumplir 25 años, apenas ha disfrutado de minutos en la Serie A, aunque sí estaba contando con oportunidades en la Europa League.
De esta manera, el equipo vigués se hará con los servicios de un jugador que ya conoce La Liga y no necesitará adaptación. El lateral militó durante dos temporadas en el Betis y fue traspasado este verano al cuadro romano.
Esta es una de las posiciones que más necesitaba cubrir el Celta. La otra es el centro de la defensa. En este sentido, la dirección deportiva olívica ya tiene terreno ganado con el posible fichaje del holandés Jairo Riedewald, central zurdo de 22 años y 1,82 metros de estatura procedente del Crystal Palace, donde esta campaña ha disputado cuatro partidos coperos pero no ha gozado de ningún minuto en la Premier League.