Este viernes finalizaba el periodo establecido al comienzo de la campaña de abonados, pero el club ha anunciado en esta última jornada que dará algunos días más, hasta el martes 4 de julio, para poder ‘embarcarse’ de cara a la temporada 2017-18. En esta ocasión ha sido una prórroga ligeramente inferior a lo habitual. Lo hace en el día que más colas se han generado. Los celtistas han tenido que soportar este viernes por la tarde esperas de hasta tres horas.
De hecho, por la tarde el club ha repartido números para ser atendido y poder organizar la atención a los intereados en hacerse socio. Aunque en los primeros días apenas se formaron colas, desde este lunes las esperas en las taquillas de Balaídos se han hecho muy largas. Hasta dos horas ha habido que aguardar en jornadas pasadas.
Muchos aficionados dejaron para última hora la gestión, pero otros acudieron al estadio después de intentar tramitar el abono por internet y observar que no se les aplicaba directamente el descuento familiar o por accionista.
Por ello, aunque el club ha informado de que la diferencia se devolverá ‘a posteriori’ en metálico en las taquillas, muchos celtistas han preferido retirar el carné directamente en persona con el precio correcto, dado que en estos casos la tramitación online no permite ahorrarse el viaje a Balaídos y el riesgo a encontrarse colas.