El fichaje de Sofiane Boufal es una vieja aspiración celeste. De hecho, Felipe Miñambres, que junto al vicepresidente Pedro Posada acompañó al futbolista en el acto de este lunes, reconoció que el Celta ya intentó su fichaje la temporada pasada y que este verano las negociaciones han vuelto a ser «largas y duras». El director deportivo aseguró también que «confiamos en su talento y que en el Celta vuelva a mostrar su mejor fútbol, que recupere el nivel de su gran temporada en el Lille que le sirvió para firmar por el Southampton». Esa gran campaña a la que se refiere Miñambres fue la 2015/16, en la que marcó 11 goles y dio 4 asistencias en 29 partidos de Liga.
Por su parte, el propio Boufal se mostró encantado por haber recalado por fin en el club vigués. «Este año el Celta me dio la oportunidad de dejar el Southampton, el club estaba muy interesado, por fin llegamos a un acuerdo y estoy muy contento», señaló
El franco-marroquí asegura ser un «gran fan» de la Liga española: «Veo muchos partidos». Y, como es lógico, también tiene estupendas referencias de su nuevo equipo: «Me encanta el juego ofensivo del Celta, con posesión, es el estilo que me gusta. Es una liga más técnica y jugando aquí realizo mi sueño de pequeño».
Boufal, a pesar de que estuvo ayudado por un interprete durante la rueda de prensa, también se atrevió a hablar en castellano en algunos momentos. El futbolista explicó que aprendió los rudimentos básicos del idioma en sus años de escolar en Francia y que, además de ser un seguidor apasionado de la Liga, también es un amante «de España y su cultura».
Precisamente utilizó el castellano para señalar que tiene referencias futbolísticas de Maxi Gómez y Iago Aspas y que es gran amigo de Claudio Beauvue, con el cual ha charlado dilatadamente en los últimos días sobre el Celta y Vigo.
Polivalencia
En estas dos últimas temporadas en el Southampton, Boufal, a pesar de ser diestro, se ha acostumbrado a jugar en la banda izquierda del ataque. Él, sin embargo, se define a sí mismo como «polivalente» y asegura que «puedo jugar en la derecha o la izquierda, o incluso de mediapunta. No tengo preferencia, el entrenador me pondrá donde piense que puedo aportar».
El futbolista franco-marroquí supedita su brillo individual al éxito del grupo y señala que llega comprometido y preparado para aplicarse también en tareas defensivas. «Lo más importante es el juego colectivo, puedo aportar ofensivamente, pero hoy en el fútbol también hace falta saber defender, jugar con y sin balón, y estoy dispuesto a ello», concluyó.